Oh, señor de mi amo, haz que mi amo sea fiel a mis semejantes como yo fui fiel a mi amo. Concédele que sea bueno con sus amigos y su familia como yo lo fui con él. Que sea sincero como yo, y no hipócrita, que pueda ser depositario de su confianza.
Dale un rostro alegre como el agitar de mi cola, dale el espíritu de gratitud que tuvo mi lengua al lamerle.
Nútrelo de una paciencia igual a la mía, que durante horas esperé sin quejas sus pasos, dótalo del mismo cuidado, coraje y plenitud que me movió a defenderlo si algo le ocurría.
Consérvale el corazón siempre joven, pleno de ese espíritu juguetón que yo poseí, que sea un buen hombre de la misma manera que yo fui con él.
Felipe ya no está, tampoco sus ladridos, sus anedas ravioles style, su acompañamiento, sus exigencias y necesidades; en su recuerdo nos sigue enseñando cosas.
Doscientos millones de dólares no es una cantidad palpable, existe en el mundo gente que tiene esa cantidad, pero esos 200 palitos verdes es un número que se mueve de un lado a otro en una pantalla electrónica mientras se compran y venden bienes, se timbean empresas, se colocan acciones, etc.
Doscientos millones AHORA sí es una cantidad palpable, en México allanaron la casa de unos narcos y encontraron ESA cantidad de plata. CASH.
Foto gentileza(?) Diario Clarín. Click para agrandar.
A estos no los sacan ni Stinfale y Cúneo Libarona juntos... ...porque la guita ya está incautada!
Apareció en los sueños, tan ella, seria y profesionalista, su voz sigue siendo la misma y no cambió nada en su proceder.
La hermanita... cómo se llamaba? no importa, el tema es que me parece verla en el mismo lugar dos veces por semana, y me mira como interrogando, sos vos ése? el que me miraba dibujar soles? el que me pasaba a buscar por la escuela?
(...)
Pareciera haber una predestinación a encontrarte en alguna esquina, supermercado o shopping, y –sinceramente- a menos que el sueño marque el pasado de una persona que ya no sos, y -entonces- te muestres jovial, feliz y sin cuentas pendientes con vos misma, entonces quizás –aun renegando del destino- pueda aceptarte un café esperanzado en que me hables de la hermosa casa que te compraste, de tu esposo e hijos, proyectos, viajes... no sé, pero tengo la impresión (fantasía?) de que vos no cerraste el capítulo.
"Sin TRigo" nació como un simple nombre alternativo a un blog ajeno que no prosperó, para esa época yo ya hacía casi un año(?) que escribía en La Redó y me decidí a largarme con el blog propio.
El primer leit motiv fue "Sin TRigo pero con mucha paja", hubo otros, el que más duró fue "Sin TRigo pero con mucho fuego"; hubo un momento en que cayó en mis manos uno de esos libros que te queman la cabeza, hablaba -entre muuuchas otras cosas- de la importancia del maíz en la vida del aborigen americano (el maíz es el único cereal originario de América), un aborigen "sin maíz" no existe, muere, su vida toda gira en torno a su cultivo.
Puede decirse entonces que cada uno debe buscar "su maíz", yo ya estaba sin trigo y entonces empecé a buscar mi maizal.
Empieza hoy el "Camino al Maíz".
Pueden saludar al partir.
Pueden acompañar un par de kilómetros.
Pueden señalar los pasos a seguir si conocen el camino.
Pueden acercarse a saludar desde el borde del camino.
Pueden -cada tanto- alcanzarnos una vianda para recuperar fuerzas.
A veces un empujoncito o bastón puede ser de ayuda.
Alguno quizás pueda ofrecer refugio nocturno.
Voy a pie, hay lugar para quien quiera sumarse.
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